Cuesta Duarte. Pit: Recuperación salarial en el debe. Desindexar es un riesgo para los trabajadores
SEBASTIÁN CABRERA
Para el Instituto Cuesta Duarte, órgano de investigación del Pit-Cnt, la mayoría de los trabajadores no terminará de recuperar el salario real perdido en la administración de Jorge Batlle, una de las promesas del gobierno de Tabaré Vázquez.
Los economistas del Cuesta Duarte lo dijeron ayer, en la presentación de su informe de coyuntura, adonde se analiza la política económica, el mercado laboral, las finanzas públicas y los consejos de salarios, entre otros aspectos.
En el informe advierten que, aunque se comparte el espíritu, las medidas desindexatorias oficiales "suponen demasiado riesgo para el poder adquisitivo" de los trabajadores. "No es conveniente ni justo que sea la variable que contribuya a frenar la presión inflacionaria", dice el informe.
El ministro Danilo Astori escuchó anoche la presentación. Fue recibido en el teatro de AEBU por el coordinador del Pit-Cnt, Fernando Pereira, y el director del Cuesta Duarte, Ruben Villaverde -ambos de la corriente moderada Articulación- y el secretario de formación Carlos Cachón, socialista. En las primeras filas no había sindicalistas de relieve del Partido Comunista, una de las corrientes con más presencia en el Pit-Cnt.
Serio, el ministro siguió las exposiciones de los economistas Hugo Bai y Eva Szarfman, sin hacer gestos de aprobación ni rechazo. Luego dijo que el trabajo es "solvente y concreto", y que tenía más acuerdos que discrepancias. Pero a la salida afloró el ministro-candidato: cuando aparecieron celulares y cámaras, Astori accedió gustoso a sacarse varias fotos e incluso besó a varios niños.
PELIGRO. Al comentar el informe del Cuesta Duarte, Astori dijo que los ajustes de salarios no han sido un factor de creación de inflación hasta el momento, pero pidió extremo cuidado "para que no se conviertan en el futuro en un factor de propagación de la inflación y eso tiene mucho que ver con la tercera ronda".
En ese marco se explica la flexibilidad que plantea el gobierno para esta ronda salarial en ciernes, adonde se incluye "tratamiento específico para sectores diferentes", prioridad para los sumergidos e incremento del salario real.
Pero Astori no respondió ayer al diagnóstico del Cuesta Duarte acerca de que muchos empleados privados no terminarán de recuperar lo perdido. Sólo apuntó: "El compromiso lo mantenemos, pero también hay que cuidar el empleo".
META. Los técnicos fundamentaron su análisis. La pérdida salarial promedio en el gobierno anterior ronda el 23% y hasta ahora se recuperó cerca de 14%. Pero los economistas del Cuesta Duarte creen que se debería crecer hasta 30% para "recuperar realmente lo que se perdió" y que la inflación "no se coma" lo ya otorgado.
"Estamos a medio camino y ya corrió el 60% de la administración. Hay que mejorar el ritmo de los ajustes salariales. La productividad ha crecido más que los salarios en estos tres años, por eso creemos que los ajustes no provocarán presión inflacionaria", indicó Bai.
Los cálculos del Pit-Cnt apuntan a que el ajuste salarial retroactivo al 1° de julio -que se está negociando por estos días en los consejos de salarios- puede variar entre 5,7% y 8%, dependiendo de la alternativa de pauta salarial que se negocie y de los porcentajes que acuerden.
Los economistas estiman que el salario real promedio del sector privado aumentará cerca de 4% en 2008. "De verificarse este crecimiento, entre 2005 y 2008, el salario real medio privado habrá crecido 18,7%, restándole un incremento de alrededor de 10% en lo que queda del actual gobierno para recuperar lo perdido del anterior", indica el informe. Es casi imposible que ello suceda, salvo en casos muy puntuales, confió una fuente del Cuesta Duarte.
Como el margen de negociación es más amplio en esta ronda, el informe difundido ayer dice que "evidentemente no todos podrán obtener los máximos aumentos previstos en las pautas salariales". Y puntualiza que sólo podrían recuperar lo perdido aquellos sectores que logren recuperación salarial muy cercana al máximo que plantea una de las dos alternativas de la pauta: la de 30 meses, que permite hasta 5% anual de crecimiento salarial.
En la otra fórmula prevista se establece un piso de crecimiento de 1% anual, "lo cual hace difícil estar cerca de recuperar lo perdido". Para el Pit-Cnt esta última ronda de negociación es "crucial" para terminar de recuperar el salario perdido y que se cumpla con el compromiso realizado en 2005 por el gobierno.
EN EL DEBE. Aunque las pautas del Ejecutivo para la tercera ronda recogen planteos impulsados por los sindicatos, el Pit-Cnt marca como "debilidades importantes" de esos lineamientos la desindexación extrema y el establecimiento de franjas de salarios sumergidos "demasiado bajas". El instituto recomienda impulsar modificaciones "tendientes a garantizar cumplimientos salariales".
El gobierno ha planteado esta vez convenios más extensos, de 24 o 30 meses: se avanza hacia la estrategia de que los ajustes "pierdan cierto grado de relación con la evolución de los precios de la economía" y que haya más tiempo entre cada aumento. Otra medida es la baja en la frecuencia con la que se aplican los correctivos por la inflación pasada (en una de las fórmulas), y la incorporación de inflación proyectada por el Banco Central, reemplazando gradualmente la inflación proyectada por los privados.
"Más allá de compartir el espíritu desindexatorio, sin el cual se podrían reforzar presiones inflacionarias, tal como está planteada hay demasiados riesgos para el poder adquisitivo. Los trabajadores de sectores menos dinámicos y con menor poder de negociación quedan relegados en el objetivo de recuperar el 100% del salario real perdido en el anterior gobierno", concluye el Cuesta Duarte.
SEBASTIÁN CABRERA
Para el Instituto Cuesta Duarte, órgano de investigación del Pit-Cnt, la mayoría de los trabajadores no terminará de recuperar el salario real perdido en la administración de Jorge Batlle, una de las promesas del gobierno de Tabaré Vázquez.
Los economistas del Cuesta Duarte lo dijeron ayer, en la presentación de su informe de coyuntura, adonde se analiza la política económica, el mercado laboral, las finanzas públicas y los consejos de salarios, entre otros aspectos.
En el informe advierten que, aunque se comparte el espíritu, las medidas desindexatorias oficiales "suponen demasiado riesgo para el poder adquisitivo" de los trabajadores. "No es conveniente ni justo que sea la variable que contribuya a frenar la presión inflacionaria", dice el informe.
El ministro Danilo Astori escuchó anoche la presentación. Fue recibido en el teatro de AEBU por el coordinador del Pit-Cnt, Fernando Pereira, y el director del Cuesta Duarte, Ruben Villaverde -ambos de la corriente moderada Articulación- y el secretario de formación Carlos Cachón, socialista. En las primeras filas no había sindicalistas de relieve del Partido Comunista, una de las corrientes con más presencia en el Pit-Cnt.
Serio, el ministro siguió las exposiciones de los economistas Hugo Bai y Eva Szarfman, sin hacer gestos de aprobación ni rechazo. Luego dijo que el trabajo es "solvente y concreto", y que tenía más acuerdos que discrepancias. Pero a la salida afloró el ministro-candidato: cuando aparecieron celulares y cámaras, Astori accedió gustoso a sacarse varias fotos e incluso besó a varios niños.
PELIGRO. Al comentar el informe del Cuesta Duarte, Astori dijo que los ajustes de salarios no han sido un factor de creación de inflación hasta el momento, pero pidió extremo cuidado "para que no se conviertan en el futuro en un factor de propagación de la inflación y eso tiene mucho que ver con la tercera ronda".
En ese marco se explica la flexibilidad que plantea el gobierno para esta ronda salarial en ciernes, adonde se incluye "tratamiento específico para sectores diferentes", prioridad para los sumergidos e incremento del salario real.
Pero Astori no respondió ayer al diagnóstico del Cuesta Duarte acerca de que muchos empleados privados no terminarán de recuperar lo perdido. Sólo apuntó: "El compromiso lo mantenemos, pero también hay que cuidar el empleo".
META. Los técnicos fundamentaron su análisis. La pérdida salarial promedio en el gobierno anterior ronda el 23% y hasta ahora se recuperó cerca de 14%. Pero los economistas del Cuesta Duarte creen que se debería crecer hasta 30% para "recuperar realmente lo que se perdió" y que la inflación "no se coma" lo ya otorgado.
"Estamos a medio camino y ya corrió el 60% de la administración. Hay que mejorar el ritmo de los ajustes salariales. La productividad ha crecido más que los salarios en estos tres años, por eso creemos que los ajustes no provocarán presión inflacionaria", indicó Bai.
Los cálculos del Pit-Cnt apuntan a que el ajuste salarial retroactivo al 1° de julio -que se está negociando por estos días en los consejos de salarios- puede variar entre 5,7% y 8%, dependiendo de la alternativa de pauta salarial que se negocie y de los porcentajes que acuerden.
Los economistas estiman que el salario real promedio del sector privado aumentará cerca de 4% en 2008. "De verificarse este crecimiento, entre 2005 y 2008, el salario real medio privado habrá crecido 18,7%, restándole un incremento de alrededor de 10% en lo que queda del actual gobierno para recuperar lo perdido del anterior", indica el informe. Es casi imposible que ello suceda, salvo en casos muy puntuales, confió una fuente del Cuesta Duarte.
Como el margen de negociación es más amplio en esta ronda, el informe difundido ayer dice que "evidentemente no todos podrán obtener los máximos aumentos previstos en las pautas salariales". Y puntualiza que sólo podrían recuperar lo perdido aquellos sectores que logren recuperación salarial muy cercana al máximo que plantea una de las dos alternativas de la pauta: la de 30 meses, que permite hasta 5% anual de crecimiento salarial.
En la otra fórmula prevista se establece un piso de crecimiento de 1% anual, "lo cual hace difícil estar cerca de recuperar lo perdido". Para el Pit-Cnt esta última ronda de negociación es "crucial" para terminar de recuperar el salario perdido y que se cumpla con el compromiso realizado en 2005 por el gobierno.
EN EL DEBE. Aunque las pautas del Ejecutivo para la tercera ronda recogen planteos impulsados por los sindicatos, el Pit-Cnt marca como "debilidades importantes" de esos lineamientos la desindexación extrema y el establecimiento de franjas de salarios sumergidos "demasiado bajas". El instituto recomienda impulsar modificaciones "tendientes a garantizar cumplimientos salariales".
El gobierno ha planteado esta vez convenios más extensos, de 24 o 30 meses: se avanza hacia la estrategia de que los ajustes "pierdan cierto grado de relación con la evolución de los precios de la economía" y que haya más tiempo entre cada aumento. Otra medida es la baja en la frecuencia con la que se aplican los correctivos por la inflación pasada (en una de las fórmulas), y la incorporación de inflación proyectada por el Banco Central, reemplazando gradualmente la inflación proyectada por los privados.
"Más allá de compartir el espíritu desindexatorio, sin el cual se podrían reforzar presiones inflacionarias, tal como está planteada hay demasiados riesgos para el poder adquisitivo. Los trabajadores de sectores menos dinámicos y con menor poder de negociación quedan relegados en el objetivo de recuperar el 100% del salario real perdido en el anterior gobierno", concluye el Cuesta Duarte.
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