SOLIDARIDAD CON EL PUEBLO PALESTINO

El Secretariado Ejecutivo del PIT CNT manifiesta su indignación y condena la nueva ofensiva militar del gobierno de Israel contra Gaza puesta de manifiesto con el ataque aéreo masivo perpetrado el pasado 27 de diciembre 2008 y continuada con la intervención directa en el territorio. Esta nueva ofensiva está causando cientos de muertos y miles de heridos en el pueblo palestino.
La intervención militar se suma al bloqueo del gobierno israelí contra la Franja de Gaza, dirigido a aniquilar por hambre y enfermedad a la población palestina.
Desde hace más de un año, Israel con el apoyo, principalmente de Estados Unidos, mantiene en Gaza un bloqueo económico que constituye, según la Organización de las Naciones Unidas y las organizaciones humanitarias, una situación de “catástrofe humanitaria”. A través del bloqueo de alimentos y combustibles, mediante el cierre de fronteras, se ha estado registrando una verdadera masacre del millón y medio de palestinos que viven en la Franja de Gaza, por desnutrición, enfermedades y carencias de condiciones básicas para la supervivencia.
La actual invasión precedida por los bombardeos aéreos no corresponde por lo tanto a una acción aislada sino a la denominada y planificada Operación “Plomo fundido”, que de acuerdo a declaraciones del gobierno israelí busca expulsar a los palestinos de ese territorio, y según los hechos, sembrar la muerte y el terror en la población civil.

Ante esta situación, el Secretariado Ejecutivo del PIT CNT:
· Reclama el fin de la agresión contra el pueblo palestino por parte de Israel con el apoyo de Estados Unidos, tanto a través de operaciones militares como del bloqueo económico.
· Demanda que el gobierno de nuestro país adopte una posición activa para lograr el cese de la intervención israelí en Gaza.
· Expresa su solidaridad con el pueblo palestino y convoca a la comunidad internacional para que ponga fin a esta masacre.
· Reitera su llamado por la paz entre los pueblos como condición imprescindible para un mundo más justo.

Montevideo, 5 de enero, 2009