"Aqui estamos, consternados, rabiosos...
Asi decia don Mario Benedetti, en su poema, cuando la muerte del "Che", parafraseamos de igual forma frente a tu muerte.
Tal vez el dolor enlute, oscuresca, desdibuje, o quizas sea un simple ramalazo de dolor que hiere, perfora, horada, cuestiona como fue su palabra sencilla, simple, directa, buscandonos !!uruguayas y uruguayos!!
!!Latinoamericanos!! desde el Bravo a la Patagonia.
La tumba es este cielo, que cobija a los hombres que con su palabra, hicieron temblar, vibrar, emocionar y entregar la vida por una America libre y soberana, junto a Cuba, a Mexico, a Salvador a Guatemala, a Venezuela, a Peru, a Chile a Argentina, a Bolivia, a Brasil, a todos los rincones de America tan cubiertos de sangre heroica, esa voz sencilla llego desde el compromiso de vivir sin malgastar iluciones plasticas.
Hombre, Mujer, Ser, Humano, comprometido con su tiempo, identidad de este pueblo uruguayo, esquina del cono sur, que tiembla y transpira, en tono, al hablar de una historia que cobija a otros sin nombre que han llenado los rios de libertad.
Todos aguardabamos el desenlace, de la condena biologica, pero es lacerante el dolor, no permitiremos encerrarlo en el ocaso, jamas, ha quien ha sido nuestra identidad, de hombres y mujeres de un tiempo, que han sabido sembrar el presente.
Quien no dira que en la calle "somos muchos mas que dos..."
Quien? no enamorara atraves de un cafe, quien ? no creera que es posible derrumbar molinos, quien ? no confiara en el futuro, desde el taco escondido de una pisada sobre el abismo de la vida de un poema de Mario, ese de la mirada tierna, la voz pausada, el andar de un grande sin ruido, como siempre uruguayo, latinoamericano, hombre que entro en el universo de quienes nos pertenecen y son identidad humana.
Vaya entonces el compartido abrazo, que no pude darte en nombre del hombre.
Asi decia don Mario Benedetti, en su poema, cuando la muerte del "Che", parafraseamos de igual forma frente a tu muerte.
Tal vez el dolor enlute, oscuresca, desdibuje, o quizas sea un simple ramalazo de dolor que hiere, perfora, horada, cuestiona como fue su palabra sencilla, simple, directa, buscandonos !!uruguayas y uruguayos!!
!!Latinoamericanos!! desde el Bravo a la Patagonia.
La tumba es este cielo, que cobija a los hombres que con su palabra, hicieron temblar, vibrar, emocionar y entregar la vida por una America libre y soberana, junto a Cuba, a Mexico, a Salvador a Guatemala, a Venezuela, a Peru, a Chile a Argentina, a Bolivia, a Brasil, a todos los rincones de America tan cubiertos de sangre heroica, esa voz sencilla llego desde el compromiso de vivir sin malgastar iluciones plasticas.
Hombre, Mujer, Ser, Humano, comprometido con su tiempo, identidad de este pueblo uruguayo, esquina del cono sur, que tiembla y transpira, en tono, al hablar de una historia que cobija a otros sin nombre que han llenado los rios de libertad.
Todos aguardabamos el desenlace, de la condena biologica, pero es lacerante el dolor, no permitiremos encerrarlo en el ocaso, jamas, ha quien ha sido nuestra identidad, de hombres y mujeres de un tiempo, que han sabido sembrar el presente.
Quien no dira que en la calle "somos muchos mas que dos..."
Quien? no enamorara atraves de un cafe, quien ? no creera que es posible derrumbar molinos, quien ? no confiara en el futuro, desde el taco escondido de una pisada sobre el abismo de la vida de un poema de Mario, ese de la mirada tierna, la voz pausada, el andar de un grande sin ruido, como siempre uruguayo, latinoamericano, hombre que entro en el universo de quienes nos pertenecen y son identidad humana.
Vaya entonces el compartido abrazo, que no pude darte en nombre del hombre.
Mauricio Rosencoff
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